Justo cuando acaba una película me gusta ver
los créditos, en ellos se reposa lo visto y se suele pensar qué te ha parecido
o qué vas a decir cuando te pregunten las personas con las que has ido al cine.
Y si hay que decir que es poesía visual, se
dice. Sin miedo a que te tachen de lo que sea. Por mucho que digan que eso es
lo que se dice cuando no se tiene nada que decir.
Pues Shame es poesía. Imágenes bellas
entrelazadas unas con otras. Escenas lentas, reposadas, que se recrean en la
estética de la imagen. Escenas que no tienen prisa, que te transportan hacía
ellas, que te invitan a entrar.
En Shame, Carey Mulligan canta New York, New
York, y la escena dura lo mismo que tarda ella en cantar la canción (tiempo de
la historia = tiempo del discurso), y en el transcurso te da tiempo a disfrutar
la música y la escena, y a entrar de lleno en ella. Eso es poesía.
O cuando Fassbender corre por las calles
desiertas de Nueva York. Y corres con él, porque el ritmo de la película te lo
permite.
Tampoco quiero
pasar sin mencionar la primera escena en el vagón de metro. Es una escena tensa
y excitante (más, quizá que otras escenas más evidentes de la película), en la
que es necesario que haya ese ritmo y esa pausa mencionados. Ese ritmo que hace
que algunos tilden las películas de lentas y aburridas.
En fin, el contraste entre una historia
carente de cualquier poesía, pero unas hermosas imágenes, unos decorados
impolutos y unos actores de excepción. En definitiva, una película con un ritmo
particular y una historia cruda y desagradable. Una historia de
vergüenza narrrada sin ningún pudor.
Y ni siquiera necesitaba hacer una crítica de
Shame (no ahora que tengo un montón de pelis sobre las que hablar). Pero en
honor a las personas con las que fui al cine y empezaron a minusvalorar la
película sin haber si quiera reposado el final, sin esperar a sentir el aire
fresco de la calle en la cara… en honor a ellas escribo estás palabras, y por
lo que veo (nunca sé bien lo que pienso de una película hasta que escribo sobre
ella y empiezo a sacar cosas dignas de análisis o mención) me pareció una buena
película.
5 comentarios:
Carey Mulligan cantando New York, New York rollo sexy, sólo por eso ya merece la pena verla
Un bss
No sé si es "poesía visual" pero sí sé que ésta película es visualmente perfecta: las escenas que citas del vagón de metro así lo atestiguan, pero también el comienzo con las sábanas azules, o la parte más sórdida en el club gay, todas las escenas nocturnas, la genial carrera a medianoche por Nueva York, hay muchísimos ejemplos. Eso es un gran punto a favor. Y el otro punto positivo que va de la mano de este es la banda sonora, que es increible, no sería tan buena película sin esa banda sonora que acentúa el drama de ambos. La interpretación de Michael Fassbender no tiene nada que envidiar a otras películas más "serias", y creo que no es una película tan provocativa, hay muchas escenas de sexo sí, la película en sí misma trata muy de cerca la educacuión sexual y sus influencias sobre el desarrollo de la personalidad, pero creo que no es un sexo tan explícito como el que sí encontramos en otras pelis.
Además, creo que todos nos sentimos identificados en más de un aspecto de Fassbender y Mulligan, y eso asusta y echa para atrás.
Como te dije en el facebook, lo peor de la película es que invite a quedarse con lo más evidente y pueril, no advirtiendo lo que realmente hay detrás de la historia.
Un besito Cronista
Tengo ganas de ver la película después de tu crítica. Hace poco descubrí a C. Mulligan en "Drive" y me cautivó.
Gracias por la recomendación
A quien pueda interesar hay una exposicion monografica en estos momentos, de Steve Mcqueen en El Schaulager de Basilea. Creo que sera una buena oportunidad para conocer la obra del cineasta que como los mejores artistas contemporaneos exhibe sus obras en este magnifico espacio expositivo.
http://www.schaulager.org/smq/
Pido disculpas por la falta de signos de puntuacion en mi comentario. El teclado desde donde escribo, me lo impide
Saludos,
Nan
Gracias por la info!
Publicar un comentario